Todos hemos visto como, desde hace unos años acá, uno de los principales objetivos de las empresas ha sido el hacerse cercana al consumidor, el de parecer un poco más informal. Ya no está de moda habla de usted, ni dar imagen de ejecutivo. Ahora lo importante es ser cool, tratar temas serios de forma amena, no ir siempre enchaquetado, llevar el pelo un poco rebelde, dejarse de tantos colores oscuros y pintarlo todo de amarillo, verde, naranja, rojo. Las fuentes ( tipos de letra) sólidas, rígidas y de formas bien definidas son del pasado. Los eslóganes siempre en lenguaje coloquial.

Lo hemos visto en La Sexta con sus presentadores de informativos jóvenes, alegres y desenfadados o con la nueva forma de dar los partes meteorológicos de Javier Gómez y Miriam Santamaría:

Si no les ha tocado la lotería, ¡tóquense ustedes mismos!

También las nuevas compañías telefónicas pretender ser super guays. Yoigo te explica cómo liberar el móvil:

Te pones tus zapas favoritas, hay que ir mono/a en la vida, y te lanzas a buscar una tienda en tu barrio donde liberen móviles, lo suele poner justo en la puerta. Justo. Esas donde puedes comprarte un tupper, o una felpa para jugar al tenis. Liberar tu móvil es algo muy normal, no te asustes. Lo libera tu vecino, la suegra de tu vecino, …

mientras que Simyo saca a un jóven photoshopeado que dice:

Mi móvil como la hamburguesa: sin pepinillo y como me da la gana.

La modernización también ha llegado a la política. Ya basta de aburridos discursos (bueno no, eso aún no se ha acbado), ahora hay que ir directamente al ciudadano y llamarlo al móvil como hace nuestro amigo Rajoy ( ver el video que no tiene desperdicio) en un intento de hacerse el moderno. Además, también se ha hecho una cuenta en facebook. Dentro de nada lo mismo lo vemos en pantalones piratas. Lo mejor es que luego suelta perlas como esta.

Zapatero tampoco se queda atrás. Hace unos meses aceptó una entrevista con uno de los presentadores mas avispados de la televisión, Andreu Buenafuente. Le recibió en la Moncloa de una forma bastante amena, nada de entrevistas rígidas e inflexibles. Fue una cosa incluso divertida. Le preguntó a Andreu si había venido en cercanías, debido al retraso.

También se creó un canal en Youtube en el que los usuarios se grababan haciendo sus preguntas y los políticos respondían.

Incluso los príncipes de Asturias intentan dar aspecto de familia normal dejando entrar a periodistas a su apartamento para ver cómo juegan con sus Sofía y Leonor.

¡Que país mas vanguardista!